3,2,1 se apagó el sensor de la luz y solo se escuchaba su respiración junto a la mía. No quería que el minutero siguiera avanzando. ¡Párenlo por favor! que sus besos me están haciendo enloquecer. Me negaba a soltarla, a dejarla ir. Otra vez no.
Te haré una pregunta que no sé si querrás responder, si no quieres, tranquila que no pasa nada - le dije. Y con un susurro y una sonrisa en los labios, me hizo sentir la persona más feliz
No hay comentarios:
Publicar un comentario